Al final de cada turno, todas las carretillas elevadoras se llevan de vuelta a sus estaciones para cargar todas las baterías a la vez. Esto eleva el consumo de energía, especialmente al inicio del proceso de carga, provocando costosos picos de corriente. Si esto sucede de manera habitual, el consumo superará la cuota anual contratada con el proveedor de electricidad, lo que supondrá elevados gastos suplementarios y costes de suministro adicionales. Para afrontar esta situación muchas empresas desconectan de la red maquinaria de producción o incluso almacenes y áreas de producción enteras, por lo que a veces las interrupciones en la actividad de la empresa son debidas al consumo de picos de corriente simultáneos de los sistemas de carga de baterías.